"MONÓLOGOS FEMENINOS"

Por Silvia Ruiz M.

En el mes de marzo, en el marco de las celebraciones por el Día Internacional de La Mujer, el Centro Cultural Español fue el escenario de la presentación de “Monólogos Femeninos”. La puesta en escena tuvo como protagonistas a 12 talentosas escritoras que transmitieron el sentir de la mujer a lo largo de la historia. Conversamos al respecto con Ana María García Silva, coordinadora general del evento y directora de La Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).

¿Cómo surgió Monólogos Femeninos?

Monólogos Femeninos existe desde hace seis años en España, por iniciativa de la escritora y actriz española Cristina Jarque. Ella es la creadora y la que preside la ”Asociación Cultural Lapsus de Toledo”, que pertenece a esa misma ciudad.

La Asociación es cultural; sin embargo, sus integrantes –la mayoría psicoanalistas– realizaban muchos seminarios, cursos y conferencias, y querían llevar este espectáculo al público en general. Entonces se les ocurrió hacerlo a través de personajes femeninos de la literatura, y así ellos empezaron a hacer los monólogos en distintos lugares de España, principalmente en cafés culturales. Iban las invitadas y leían el texto que habían escrito basándose en el personaje que habían elegido pero la diferencia era que también lo caracterizaban, es decir se disfrazaban del personaje elegido, sin embargo no lo actuaban y hasta ahora no lo hacen.

¿De quién fue la idea de presentar Monólogos Femeninos en el Perú?

Agradezco tu pregunta tan precisa, fuimos animadas por Cristina Jarque, quien caracterizó a Esmeralda y llegó al Perú invitada por nosotros. La idea de la puesta en escena fue aporte nuestro.

Cuando hizo la convocatoria a las escritoras, ¿cuál fue su reacción?

Cuando les propuse hacer algo semejante, mostraron agrado y de ellas surgió la idea de la actuación. Algunas se mostraron renuentes, resultaba un poco complicado puesto que no son actrices; no obstante entre ellas mismas se animaron.

¿Todas las escritoras son peruanas?

Participaron 11 escritoras peruanas y una invitada española: Cristina Jarque.

¿Quién asumió el reto de la dirección de la obra?

Nosotras contamos con el aporte valiosísimo de Víctor Prada, director de prestigio, quien de forma desinteresada asumió el reto. En el grupo de las 12 escritoras había solo cuatro actrices: Elena Pasapera, Dafne Navarra, Alicia Saco y Cristina Jarque, las demás eran solo escritoras. Se tuvo que realizar un trabajo intensivo y al final todo resultó muy bien.

Además el elenco contó con la colaboración de tres asesores: Antonio González Montes (literatura), Alberto Cruzalegui (psicoanalista), y Joseph Dager (historiador).

¿Quién escribió los monólogos?

Cada escritora escogió su personaje y escribió su propio monólogo y la caracterización del personaje. Fue todo un proceso, hemos revisado varias veces los textos y comentado las vivencias de cada uno de los personajes de la época en la que estaban ubicados, y del mensaje que podríamos transmitir para la mujer de hoy.

Cabe resaltar que las escritoras se sentían identificadas con esos personajes de la literatura, incluso algunas de ellas habían realizado investigaciones, escrito tesis y libros sobre el personaje escogido. Constituía el sueño de cada una de ellas.

¿Escogieron la obra pensando en el Día internacional de la Mujer?

Cierto, esa fue la motivación para fijar la fecha. Los ensayos los empezamos desde octubre, primero se trabajó el texto para luego coordinarlo con el tema de la actuación y hacerlo más cautivante para el público.

Los personajes escogidos fueron mujeres que se caracterizaron por ser muy inteligentes y valientes para su época, que se rebelaban en contra de la violencia, la marginación…

Realmente hay un mensaje reivindicativo en todas ellas, y una defensa de la libertad… es lo que yo veo, básicamente. El tema del amor en relación con la pareja, el rol de la mujer, los hijos... Nosotras no lo planificamos así, todo eso salió a la hora de ahondar en cada uno de los personajes y se puede ver que los conflictos son los mismos hasta nuestra época.

¿Cree que la situación de la mujer ha cambiado a lo largo de todos estos siglos, o sigue siendo la misma?

Indudablemente que no es la misma. Creo que sí se ha conseguido algún cambio, por ejemplo la mujer se ha independizado profesionalmente. Ahora el consumo de un hogar obliga a que la pareja trabaje, es una necesidad creada por la sociedad.

Sin embargo, hoy en día surgen otros problemas, sobre todo para las mujeres casadas. Existe una sobrecarga de responsabilidad, ella ahora trabaja en la oficina y en la casa asume labores domésticas y la crianza de los hijos.

Entonces, ha habido una apertura en la que la mujer se ha integrado, pero todavía la situación de la mujer sigue siendo diferente a la situación del hombre. Siento que están los dos limitados por este mundo neoliberal y consumista, ni el hombre ni la mujer son libres en este momento. 

En cuanto a la situación de violencia contra la mujer, ¿cree que ha mejorado o sigue siendo la misma?

Pienso que la violencia contra la mujer se ha acrecentado y se cometen diariamente en el mundo muchos feminicidios. Lo que sucede es que el grado de frustración ha aumentado considerablemente en el ser humano. Muchos dicen que siempre ha sido así, solo que ahora lo vemos. No obstante, todo ser humano tiene mucho de violencia interna y esto se manifiesta contra el más débil, por eso es que la violencia es en contra de la mujer y de los hijos.  

¿En qué momento de la historia la mujer se volvió sujeto de desprecio?

El origen de la inferioridad hacia la mujer creo que se da desde el comienzo de los tiempos. Ahora, habría que explicar eso desde el punto de vista antropológico. ¿Qué es lo que ha ocurrido? Es cierto: históricamente han habido sociedades regidas por la mujer, incluso en el aspecto religioso primaban las diosas, las sacerdotisas… la mujer tenía un papel importantísimo en el campo religioso. Pero poco a poco lo ha ido perdiendo y ahora está excluida totalmente, sobre todo en algunas religiones. No sé en qué momento sucedió eso, pero hay teorías que lo explican como una reacción de temor del hombre ante el poder de la mujer.

¿Qué le parece la noticia que dice que en las empresas, en el Perú, por el mismo trabajo las mujeres cobran menos que los hombres?

La escuché y me parece difícil de creer. Que a una mujer se le dé un puesto inferior, eso ya es sabido, pero que por el mismo trabajo se le pague menos, considero que es totalmente absurdo.

Una reflexión final para los lectores de la revista…

Aquí hay dos cosas que comunicar: un mensaje de denuncia de la situación de la mujer y un mensaje de anuncio de la posibilidad de que a partir de los valores de la mujer, y de la fuerza de la mujer, se construya una nueva sociedad que el mundo necesita

Además, creo que vamos a llegar a una época en la que sí se van a restituir los valores femeninos. Las mujeres tenemos valores que debemos rescatar para esta época en que el mundo necesita valores femeninos, sobre todo el amor para que haya un futuro más ordenado, más sensible, y tengamos una situación de igualdad y una convivencia más armoniosa con los hombres.

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LAS ESCRITORAS

Cristina Jarque (Esmeralda) ”Nuestra Señora de París”, Víctor Hugo (1831)

Amalia Cornejo (Antígona) “Mitología griega”, Sófocles (422 A.C.)

Sarita Ballón (Yocasta) “Edipo Rey”, Sófocles

Daniela Ferreyros (Nora) “Casa de Muñecas”, Ibsen (siglo XIX)

Marita Palomino (Emma) “Madame Bovari”, Flaubert (1856)

Elena Pasapera (Virginia Wolf) Londres (1882-1941)

Alicia Saco (María Jesús Alvarado) Perú (1878)

Eliana Vásquez (Sor Juana Inés de la Cruz) siglo XVII

Alina Gadea (Medea) Eurípides 431 A.C.

Liliana Miranda (La Faraona) (1923)

Jeamel Flores (Santa Teresa de Jesús), Ávila (1515)

Carmen Navarra (Doña Rosita, la soltera) Federico García Lorca (1935)